jueves, 29 de diciembre de 2011

Burbuja plateada

Me puedo caer, me he caído.
Otra vez… y ¿qué?
No te pido que me salves,
así que para.
Dame dos segundos, que desaparezco
entre rosas, mariposas o cloacas
¿Qué más da?
Tu mirada me amenaza, me reta
a seguir volando por los sueños,
Que no paro.
Sola ando, sobre nubes, cansada,
pero viva.
Viva de mí y del aire,
que llama y atrapa mis besos
dentro de burbujas plateadas.


miércoles, 30 de noviembre de 2011

VIDA

Esa sensación… ¿alguna vez la habéis sentido?

Sientes que recoges toda la energía del mundo hasta tu pecho,  que vas a estallar en mil pedazos, que vas a convertirte en polvo y te vas perder en el universo. De repente eres luz. Luz que quiere salir, que escapa por tus ojos y tu boca. Nadie la ve, tú la sientes, la energía que entra y sale, la vida que late por cada rincón de tu ser. Sólo te apetece gritar, gritarle al mundo entero  que estás viva. 


Creo que no existe sensación más hermosa. 

domingo, 7 de agosto de 2011

¿Preguntas... o respuestas?

Demasiadas preguntas, demasiadas respuestas
Alocadas, llenas de aire comprimido en un espacio muy pequeño
Preguntas insanas, respuestas confusas.
El cielo no es tan grande como al principio,
Ni tú ni yo, lo somos.
Ni las preguntas, ni las respuestas.
Esta sensación que acaba en un beso amargo, una mirada perdida..
Dame un momento para olvidarte, para olvidarte mal, sin ganas
Para olvidarte un momento.
¿Para sacarte? Para sacarte de mi ser, es precisa la muerte.  

viernes, 1 de abril de 2011

Desdoblamiento

Sin reloj
Lobos en el pecho
Una canción.
Electricidad en el espacio,
mi espacio, tu universo.

Soy el oxígeno que te recorre,
te explora.
Soy tu puerta,
tu llave.

Llueve. Soy yo sobre ti,
dentro y fuera (de mí)
Tu voz, tus pensamientos,
sentimientos.
Rosas.

¿Puedes sentirme?

No me dejo ver,
estoy entre
tu nariz y la punta del pie.
En ti.
Vivo por y para ti,
eres mi vida, ya ves.

¿Puedes sentirte? 

miércoles, 16 de febrero de 2011

(Sin) sentido

Trocitos de nubes golpeando una ventana,
pájaros aullando.
Palabras náufragas,
árboles secos.
La Luna y el mar, un reflejo,
una metáfora viva. Casualidad.

miércoles, 26 de enero de 2011

Silencio

Aquellas palabras que dejaba escritas en cuadernos perdidos por su habitación, eran pájaros de papel enjaulados en el alma de una niña asustada. Normalmente, los mataba el olvido, un olvido que acababa desgarrando sus plumas, dejándolos sin alas para siempre. Temía que, cuando quisiera abrir las puertas de esa jaula que era su alma, ya no quedara pájaro capaz de volar, sino un cementerio de palabras enterradas, una necrópolis de amor.