Me puedo caer, me he caído.
Otra vez… y ¿qué?
No te pido que me salves,
Dame dos segundos, que desaparezco
entre rosas, mariposas o cloacas
¿Qué más da?
Tu mirada me amenaza, me reta
a seguir volando por los sueños,
Que no paro.
Sola ando, sobre nubes, cansada,
pero viva.
Viva de mí y del aire,
que llama y atrapa mis besos
dentro de burbujas plateadas.